Algunos datos biográficos
Empecé a cantar en coros a los doce años, al tiempo que aprendía a leer y escribir música. También en mi niñez y adolescencia estudié guitarra y piano . Mientras continuaba mis estudios en la Facultad de Artes y Ciencias Musicales de la U. C.A. donde cursé unas veinte materias de la carrera de Composición, comencé a tomar clases de canto de manera accidental, para poder cantar los solfeos, e inmediatamente la voz se impuso como instrumento principal. Posteriormente tomé clases de teatro.
Mi ingreso al Coro Estable del Teatro Colón en el año 1990 fue un hecho que sin duda marcó mi vida profesional. La posibilidad de participar en la realización de producciones de los grandes títulos operísticos aportó en terminos de experiencia profesional en la misma medida que anteriormente lo habia hecho la formación académica.
Paralelamente a la actividad en el ámbito del Coro Estable fui desarrollando una carrera solista, tanto en ópera como en música de cámara. En este ámbito desde el año 1997 he sido regularmente convocada por las diversas asociaciones de compositores de nuestro medio. .Interpreté a Juan José Guiliani, Norma Lado, Roberto García Morillo, Alejandro Pinto, Roberto Caamaño, entre muchos otros. Especial mención merece la colaboración mantenida con Eduardo Wilde por casi quince años y con Jorge Tagliapietra en el presente.
Quisiera agregar que encuentro en el canto un privilegio extra, por el hecho de estar diciendo un texto. El cantante, no importa si canta ópera, música de cámara, culta o popular, siempre es como el actor, Lo más interesante de la música cantada es que cuenta cosas.
De “Reflexiones sobre la experiencia de la música” por Ana Larreategui
Revista Musicar (de compositores e intérpretes) Edición n° 35
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